En Chile, las empresas deben adherirse a un conjunto de normas ambientales diseñadas para proteger el medio ambiente y promover prácticas sostenibles. Estas regulaciones, administradas por la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) y el Ministerio del Medio Ambiente, son fundamentales para garantizar que las actividades empresariales se realicen de manera responsable y respetuosa con el entorno natural.
¿Qué son las normas ambientales?
Las normas ambientales son un conjunto de regulaciones, directrices y leyes diseñadas para proteger el medio ambiente y promover prácticas sostenibles en diversos sectores.
Las normas establecen los límites y procedimientos que las empresas, organizaciones y ciudadanos deben seguir para minimizar la contaminación industrial y garantizar la conservación de los recursos naturales.
Incluyen reglas para el manejo de residuos, control de emisiones contaminantes, uso eficiente del agua, y protección de la biodiversidad y los ecosistemas.
El objetivo principal de las normas ambientales es equilibrar el desarrollo económico con la preservación del medio ambiente, promoviendo un crecimiento sostenible que beneficie tanto a las generaciones actuales como a las futuras.
¿Para qué sirven las normas ambientales?
Sirven para establecer un marco regulador que garantice la protección y preservación del medio ambiente al regular las actividades humanas que pueden tener un impacto negativo en los ecosistemas.
Su principal propósito es prevenir la contaminación del aire, agua y suelo, gestionar adecuadamente los residuos, y conservar los recursos naturales. buscando que las prácticas industriales, agrícolas y comerciales se realicen de manera sostenible y responsable.
Las normas también promueven la eficiencia en el uso de recursos, fomentan la adopción de tecnologías limpias y sostenibles, y promueven la rehabilitación de áreas degradadas.
Por otro lado, contribuyen a la educación y concienciación ambiental, estimulando una cultura de responsabilidad ecológica entre las empresas y la ciudadanía.
8 normas ambientales ISO para empresas que deben cumplir
Implementar estas normas no solo ayuda a proteger el medio ambiente, sino que también puede mejorar la reputación de la empresa y contribuir a un desarrollo económico sostenible.
Ley de aguas
La Ley de Aguas es clave para las empresas que utilizan, descargan o tienen algún impacto sobre las aguas superficiales o subterráneas. Según la normativa, las empresas deben cumplir con estrictos requisitos para el uso y gestión de agua, incluyendo la obtención de permisos de extracción y la autorización para descargas de efluentes.
La ley también impone la obligación de realizar monitoreos periódicos de la calidad del agua y de implementar medidas para prevenir y mitigar la contaminación, y exige la adopción de prácticas sostenibles para que el uso del agua no comprometa la disponibilidad futura del recurso.
Cumplir con la Ley de Aguas evita sanciones, multas y daños a la reputación de la empresa, y es indispensable para contribuir al desarrollo sostenible del entorno natural.
Ley de ruido
La Ley de Ruido regula los niveles de ruido permitidos en áreas residenciales, los cuales deben ser de 55 decibeles en horario de 7 a 21, y de 45 en horario de 21 a 7 horas; industriales, de 85 decibeles, medidos en la posición del oído del trabajador; y comerciales para proteger la salud y el bienestar de las personas.
Esta normativa establece límites específicos para la emisión de ruido en diferentes zonas y horarios, y obliga a las empresas a implementar medidas para controlar y reducir el impacto acústico de sus actividades.
Las empresas deben realizar evaluaciones de impacto ambiental relacionadas con el ruido y adoptar tecnologías y prácticas que minimicen la contaminación sonora, como el uso de barreras acústicas y el mantenimiento adecuado de maquinaria.
Ley de envases y residuos
La Ley 21.368, que regula la entrega de plásticos de un solo uso y botellas plásticas, tiene como objetivo principal proteger el medio ambiente y reducir la generación de residuos.
La normativa establece restricciones a la distribución de productos plásticos de un solo uso en establecimientos que expenden alimentos, promoviendo alternativas más sostenibles y fomentando la reutilización.
También regula el uso y disposición de botellas plásticas desechables, buscando minimizar su impacto ambiental y fomentar prácticas más responsables en el consumo de productos plásticos.
Ley de evaluación ambiental
Esta ley exige que cualquier proyecto o actividad que pueda impactar significativamente el medio ambiente pase por un proceso de evaluación ambiental exhaustivo antes de recibir autorización.
El proceso incluye la identificación y análisis de posibles impactos ambientales, la consulta con comunidades afectadas y la implementación de medidas de mitigación para reducir los efectos negativos.
La ley tiene como objetivo asegurar que los proyectos se desarrollen de manera sostenible, promoviendo prácticas que protejan los recursos naturales y la biodiversidad.
También fomenta la transparencia y la participación ciudadana en la toma de decisiones ambientales, asegurando que las empresas asuman responsabilidades y adopten prácticas que minimicen su impacto ambiental.
Ley de responsabilidad ambiental
Un daño ambiental puede ocasionar, de manera directa e inmediata, un perjuicio civil, lo cual da lugar a acciones de responsabilidad ambiental y a reclamaciones de indemnización ordinaria.
La Ley Nº 19.300 establece un régimen específico para abordar estas situaciones, que se aplica de manera general a ambas acciones, con excepciones a las normas del Derecho común.
Esta ley otorga legitimación activa a las personas naturales o jurídicas que hayan sufrido un daño ambiental, permitiéndoles solicitar la reparación del daño.
En casos en los que la reparación material no es posible, de acuerdo con los términos establecidos por la propia ley, se contempla la indemnización de daños como una forma de reparación equivalente.
Ley de residuos y suelos contaminados
La ley impone a las empresas la responsabilidad de manejar sus residuos de manera adecuada, promoviendo la reducción, reutilización y reciclaje.
Exige la implementación de planes de manejo de residuos que aseguren la correcta disposición y tratamiento de los desechos generados.
También establece requisitos para la caracterización de residuos, la gestión de áreas contaminadas y la presentación de informes sobre el cumplimiento de las normativas..
Ley de calidad de aire y protección de la atmósfera
Esta legislación impone a las empresas la responsabilidad de controlar y reducir las emisiones de contaminantes atmosféricos, promoviendo prácticas que minimicen su impacto en la calidad del aire.
Los empresarios deben cumplir con normativas específicas para la emisión de gases y partículas, realizando monitoreos periódicos y adoptando tecnologías limpias que reduzcan la liberación de contaminantes.
La ley también exige la elaboración de planes de prevención y control de emisiones, así como la implementación de sistemas de captura y tratamiento de gases contaminantes.
Además, se establecen límites máximos permisibles para diferentes tipos de contaminantes, y se requiere la obtención de permisos de emisión y la presentación de informes sobre las emisiones generadas.
Ley de derechos de emisión de gases de efecto invernadero
Al exigir que las empresas obtengan permisos para liberar una cantidad determinada de gases, la ley promueve la implementación de tecnologías innovadoras y la mejora de la eficiencia energética.
De este modo, se fomenta la reducción de la huella de carbono y se apoya el cumplimiento de los objetivos nacionales e internacionales de cambio climático.
La ley no solo contribuye a mitigar el impacto ambiental, sino que también impulsa una economía más verde y resiliente, alineada con las metas globales de sostenibilidad y desarrollo bajo en carbono.
Otras normas ambientales que no puedes dejar pasar
Hemos conocido una gran cantidad de leyes que buscan que las empresas sean más conscientes acerca de la huella que dejan en el medio ambiente, pero veamos dos de las más importantes en detalle.
Ley Nº 19.300/97: Bases del Medio Ambiente
La Ley Nº 19.300/97, conocida como la Ley de Bases del Medio Ambiente, establece los principios y normas fundamentales para la protección del entorno natural.
La legislación garantiza el derecho de las personas a vivir en un ambiente libre de contaminación y establece directrices claras para la protección ambiental y la conservación de la biodiversidad.
A través de sus disposiciones, se establecen las bases para la formulación de políticas públicas, la implementación de medidas de control y la promoción de prácticas sostenibles, asegurando así un enfoque cohesivo y coordinado para abordar los desafíos ambientales y fomentar el desarrollo sostenible en Chile.
Artículo 1°.- “El derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, la protección del medio ambiente, la preservación de la naturaleza y la conservación del patrimonio ambiental se regularán por las disposiciones de esta ley, sin perjuicio de lo que otras normas legales establezcan sobre la materia.”
Proyecto de Ley de Residuos y aplicación de la REP en Chile
El Proyecto de Ley de Residuos en Chile establece un marco integral para la gestión de residuos y promueve la Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
Esta normativa exige que los productores asuman la responsabilidad completa del ciclo de vida de sus productos, desde la fabricación hasta su disposición final.
En lugar de seguir el modelo lineal tradicional, en el que los productos se fabrican, utilizan y desechan, la REP fomenta un modelo de economía circular.
El enfoque busca minimizar los residuos a través de la reducción, reutilización y reciclaje, promoviendo prácticas sostenibles que reducen el impacto ambiental.
En Tork al por mayor conocemos la importancia de generar mejores prácticas para cuidar el medio ambiente, productos como papel higiénico y toallas de papel están hechos de manera sostenible para dar firmeza a nuestro compromiso con el planeta.